Genocidio en Gaza día 132

Terror en hospital Nasser

En horas de la madrugada el ejército israelí ingresó al Hospital Nasser en Khan Younis con tanques y ametralladoras, obligando a los civiles que ahí se refugiaban a evacuar y huir por sus vidas.

 Finalmente, esas personas tuvieron que emprender el éxodo a la ciudad sureña de Rafah, área que espera la inminente invasión terrestre israelí al mismo tiempo que se intensifican los ataques aereos. Este era la última zona segura. Los gazatíes están atrapados en el infierno.

Funcionarios de salud del centro médico dijeron que miles de personas, incluyendo pacientes críticos, permanecen dentro.

En un comunicado oficial el Ejército israelí describió el ataque como “preciso y limitado” y señalaron que tenían  “información creíble” de que combatientes de Hamas se escondían en la instalación y mantenían rehenes allí.

Un portavoz de Hamas negó las alegaciones, llamándolas “un nuevo episodio en la serie de mentiras que usa para justificar sus crímenes de guerra y ataques a instalaciones médicas en Gaza.

Israel ha hecho afirmaciones similares en el pasado pero no ha ofrecido evidencia.

Hemos dicho repetidamente que la política de nuestra resistencia palestina fue y sigue siendo alejar las instituciones públicas y civiles y el sector de la salud de cualquier actividad militar”, dijo el grupo  Hamas en un comunicado.

“Hemos pedido a las Naciones Unidas y a organizaciones relevantes en varias ocasiones traer un comité internacional para examinar los hospitales y probar que la narrativa de Israel es una mentira. Pero nuestras demandas no han sido escuchadas”.

El jefe humanitario de la ONU expresa preocupación por las redadas en el Hospital Nasser Martin Griffiths ha expresado alarma por las condiciones en el Hospital Nasser, que las fuerzas israelíes han bombardeado y allanado durante el último día.

“Los heridos y enfermos, así como el personal médico y las instalaciones, deben ser protegidos”, dijo Griffiths en un comunicado.

“Lo dije antes, pero vale la pena repetirlo: Los hospitales deben ser lugares de mayor seguridad, no de guerra”, agregó.

Canadá, Australia y N. Zelanda urgen “alto el fuego” en Gaza

Australia, Canadá y Nueva Zelanda pidieron el jueves un “alto el fuego humanitario inmediato” en Gaza, según una declaración conjunta suscrita en respuesta a los informes sobre la operación militar prevista por Israel en Rafah.

“Estamos muy preocupados por los indicios de que Israel está planeando una ofensiva terrestre en Rafah, una operación militar militar en Rafah sería catastrófica. 1,5 millones de palestinos se refugian en esta zona”, afirma el comunicado conjunto de los primeros ministros Antony Albanese (Australia), Justin Trudeau (Canadá) y Christopher Luxon (Nueva Zelanda).

“Una operación militar expandida sería devastadora. Urgimos al gobierno de Israel no tomar este camino. Simplemente no hay otro lugar adonde los civiles pueden ir”, agrega el texto. “Urge un alto el fuego humanitario inmediato”, subraya.

La declaración tripartita exhorta al gobierno de Israel a no llevar a cabo la ofensiva, aunque señala que un alto el fuego no puede ser “unilateral” e insta a Hamás a desarmarse y a liberar inmediatamente a todos los rehenes.

Los líderes también afirman que la sentencia emitida en enero pasado por la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en una denuncia por “genocidio”  presentada por Sudáfrica, obliga a Israel a proteger a los civiles y a prestarles servicios básicos y asistencia humanitaria esencial.

“La protección de los civiles es primordial y constituye un requisito del derecho internacional humanitario”, afirma la declaración. “No se puede hacer pagar a los civiles palestinos el precio de derrotar a Hamás”, concluye.

Egipto se prepara para recibir a palestinos

Según The Washington Post Egipto parece estar preparando espacio en Sinaí para palestinos desplazados. El medio estadounidense informa que el gobierno egipcio parece estar preparándose para la posibilidad de una afluencia de palestinos expulsados de Gaza si avanza un asalto israelí anticipado en Rafah.

Algunos funcionarios israelíes han promovido la expulsión de la población de Gaza desde el comienzo de la guerra, pero los aliados de Israel, incluido EE. UU., han advertido que no apoyarían el desplazamiento forzado de palestinos fuera de Gaza.

“Funcionarios egipcios han amenazado con suspender el acuerdo de paz de 40 años de los países si un ataque en Rafah obliga a los refugiados a cruzar la frontera; nuevas imágenes obtenidas por The Washington Post sugieren que Egipto se está preparando para tal escenario”, informó el Post.

Esta semana, el grupo con sede en el Reino Unido, Sinai Foundation for Human Rights, que tiene un equipo de monitoreo en Sinaí, informó que Egipto estaba construyendo una gran barrera de concreto para contener a los refugiados palestinos que podrían ser desplazados a Egipto.

El Post informó que ha verificado imágenes de video y otros datos que muestran que Egipto está “limpiando escombros de una parcela rectangular de tierra que mide aproximadamente ocho millas cuadradas [21 km cuadrados] adyacente a la frontera de Gaza, con una pared de concreto siendo construida alrededor del perímetro”.

Un funcionario egipcio no identificado también sugirió al periódico estadounidense que la medida es probablemente un plan de contingencia para lo que Egipto ve como un “peor escenario”.

Egipto ha rechazado vehementemente el desplazamiento forzado de palestinos a su territorio.

La distribución de ayuda en el norte de Gaza es “inexistente”

La portavoz de UNICEF, Tess Ingram dice que, aunque la agencia tiene cierto acceso al sur de Gaza para entregar ayuda, es casi imposible distribuir ayuda en el norte.

“El acceso a la ayuda en el norte ha sido básicamente inexistente desde el comienzo de este año. No hemos recibido las garantías de seguridad que necesitamos para entrar al norte y proporcionar ayuda allí”, le dijo a Al Jazeera.

“Lo que estamos escuchando de las familias en el terreno en el norte es que el hambre es catastrófica y la gente está recurriendo a alimentos no humanos para intentar sobrevivir.”

Algunos de los combates más intensos desde el 7 de octubre han tenido lugar en el norte, donde a más de 1.1 millones de personas se les ordenó a mediados de octubre evacuar y moverse hacia el sur mientras las tropas israelíes avanzaban en su ofensiva terrestre.

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